"…la verdadera justicia AYUDA a
detener al individuo de destruir. Si tú aplicas justicia estás ayudando
principalmente a quien detienes, pero no debes únicamente limitarte a
detenerlo, debes también reestablecer su capacidad de resarcir los daños
causados y que lo haga, su habilidad para estar en intercambio con la sociedad
y de reestablecer su capacidad de dirigirse hacia la supervivencia real de sí
mismo y de sus dinámicas (de la Sociedad)". Cordilleras de la Vida, de
Patricia Rincón.
La Justicia por encuesta es hacer
pagar, dista mucho de la cárcel y de la venganza, “ver sufrir lo que yo sufrí
por el delito”, es VENGANZA no es Justicia. Justicia en hacer pagar, que es lo
que la mayoría cree. ¿Cómo paga un individuo en la cárcel? Más bien la sociedad
lo mantiene con sus impuestos, pagando su entrenamiento para delinquir al salir
en libertad.
La Justicia en resarcir daños es
lo más cercano a hacer pagar, no sólo con indemnización económica, acciones
para resarcir y devolver su capacidad de dar intercambio, de dar algo valioso a
la sociedad con trabajo honesto, iniciando con una acción de contribución mayor
a pesar del peligro personal de detener la destrucción de la sociedad que
demuestre su compromiso. Si nos remontamos a libros de sabiduría religiosa como
la biblia, se establece si destruiste o robaste una mesa, debes asumir tu
responsabilidad reponer 3 mesas, dando un intercambio mayor a lo que
destruiste, puede construirla, además de dar el dinero o repararlas. Denunciar o detener a
la banda criminal a la cual pertenezca, para detener los hurtos. Establecer un
trabajo honesto en el que continuará ayudando a la sociedad ejerciendo sus
capacidades para una mejor supervivencia de sí mismo, su familia, amigos,
humanidad, naturaleza….
Lo material es fácil de dilucidar
en cómo resarcir, una vida o un daño a la humanidad, sería algo difícil de
determinar, la vida no tiene precio. Por ejemplo el caso de Colombia, narcoterroristas
que minaron tierras creando inválidos, asesinando mujeres y niños inocentes, ni
la cárcel ni dando su propia vida podría pagar lo que hizo y mucho menos
resarcir los daños. Si por el contrario se compromete a detener la destrucción,
de denunciar o detener a aquellos que continúen cometiendo estos delitos, a
pesar del riesgo personal desmina los campos, sus tesoros creados por la venta
del veneno de la droga, entregando todo dinero ilícito para resarcir a las
víctimas, donando prótesis, de alta calidad con cibernética y materiales de la
actualidad tecnológica, sustituyendo sembradíos ilícitos por cultivos lícitos, recibiendo
educación de Derechos Humanos de desempeñar un trabajo honesto con un salario
justo trabajar deduciendo por un período de tiempo un porcentaje de sus
ingresos para continuar resarciendo daños cometidos, puede ser que salde, pague
por sus delitos. En tal caso que continuara asesinando o envenenando a la
sociedad narco traficando, habría que hacer acciones mayores para detenerlo, no
quedaría otra alternativa que aislarlo de la sociedad en la cárcel, cambiando
el concepto de lo que hasta ahora conocemos como cárcel, convirtiéndolos en
centros de rehabilitación, de desintoxicación para salir del consumo a las
drogas, de educación de valores éticos, de educación religiosa de acuerdo a su
religión, de educación de arte y deporte, de labores técnicas y de TRABAJO, que
los impuestos de los ciudadanos honestos dejen de pagar por el crimen. En las
cárceles que trabajen con salarios justos, pagando su manutención descontándoles
el equivalente en porcentajes de sus ingresos. Esta sería la justicia que se
debiera hacer ante los delitos, mayores acciones y sus características de
acuerdo a la gravedad del delito.
Patricia Rincón
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